Por Rocío López.
Hace 22 años se estrenó Hombres de Negro (Men in Black, 1997), donde conocimos la gran dupla conformada por Tommy Lee Jones y Will Smith, filme que fue elogiado por la crítica, ya que combinó la acción, ciencia ficción y la comedia a la perfección e incluso recibió tres nominaciones a los premios Oscar.
Para el 2002 llegaría la secuela (Men in Black II) y cerraría la trilogía con Hombres de Negro 3 (Men in Black 3, 2012), desafortunadamente fueron películas que no brillaron como la primera. Este año ya está en cartelera de los cines en México Hombres de Negro: Internacional (Men in Black: International), bajo la dirección de F. Gary Gray, escrita por Art Marcum y Matt Holloway. Es importante mencionar que la saga se basa en los comics homónimos del escritor Lowell Cunningham.
La cinta gira en torno a Molly (Tessa Thompson), una joven que, después de tener un encuentro con un alienígena cuando era niña, está en la búsqueda de la agencia secreta que se enfrenta a los extraterrestres y cuando por fin la encuentra es reclutada y será entrenada por el agente H (Chris Hemsworth). Pero después de que ocurra un asesinato, el jefe (Liam Neeson) de la agencia en Londres les asigna resolver el caso.
Desde la primera secuencia, Hombres de Negro: Internacional es confusa y a lo largo del largometraje no queda claro si lo que se presenta al público es un spin off, porque funciona más como un reboot, aunque sí cuenta con referencias a la trilogía e incluso hay ciertos guiños que indican que esta historia comparte el mismo universo cinematográfico que las antecesoras.
Lo más destacable de la película es la mancuerna de Thompson y Hemsworth, que logran un equilibrio entre ambos, si bien, esto no es nuevo, debido a que ambos actores ya habían trabajado juntos en Thor: Ragnarok (2017). El personaje de Molly parece brillar más, sin embargo, en algunos de sus diálogos con empoderamiento feminista se notan forzados. Mientras que su coprotagonista quien ha demostrado ser simpático, en esta ocasión es un hombre egocéntrico, torpe y holgazán.
Otro punto a favor es la banda sonora compuesta por Chris Bacon, nominado a un premio Emmy por su trabajo en la serie de televisión Bates Motel, y Danny Elfman, cantautor y productor discográfico estadounidense, conocido por colaborar en las películas de Tim Burton, además de ser el creador del famoso tema del programa Los Simpsons.
Pese a que los efectos especiales son buenos y a nivel visual nos muestran los hermosos paisajes de las ciudades como Nueva York, Londres, París, Marruecos, Sahara y Mónaco, las escenas de acción carecen de emoción. El error más grande se encuentra en el guion, el cual es predecible y flojo con situaciones inverosímiles y pocos son los chistes que logran robarse la sonrisa del público.
Por si esto fuera poco, los villanos a cargo de los hermanos Laurent y Larry Bourgeois, quienes son reconocidos bailarines, eran antagonistas con gran potencial, pero al final no representan una verdadera amenaza, pues no se explora sus motivaciones ni se les da el suficiente protagonismo. En su momento, el atractivo fue los seres de otro planeta, en esta nueva entrega es escaso.
Pese a los grandes esfuerzos de sus protagonizas, la película no aporta nada nuevo a la franquicia ni mantiene la esencia de lo que vimos anteriormente, así que los fanáticos se sentirán decepcionados, aunque la audiencia más joven puede resultarle entretenida, pero no entrañable como lo que lograron Jones y Smith.
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