sábado, 22 de noviembre de 2014

"Dumb and Dumber to" y "Big Hero 6": Sí hacen honor a sus títulos

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Por: Jaime López Blanco

"Una pareja más tonta" o "Dumb and Dumber to", por su título en inglés, marca el reencuentro de los directores Bobby y Peter Farrelly con los actores Jim Carrey y Jeff Daniels después de  20 años del éxito que consiguieron con aquella película que contaba la historia de dos amigos, Lloyd y Harry, cuyas neuronas juntas solo servían para provocar risas y situaciones caóticas plagadas con mucho humor escatológico.

Ahora,  los amigos han regresado pero tal parece que el humor no. El argumento cuenta otra especie de road movie buddy en donde Harry (Jeff Daniels) emprende un viaje junto a su amigo de toda la vida, Lloyd (Jim Carrey), para buscar a la hija del primero y así poder tener  un trasplante de riñón compatible que le pueda salvar la vida.

El inicio parece prometedor (los primeros 5 minutos nada más) pero la fórmula y el guión se sienten forzados y muy añejos conforme avanza la cinta. Tal parece que Jim Carrey se sentía incómodo con repetir su rol o le cuesta trabajo, al principio de la trama, para volver a adentrarse en la piel de su inepto personaje.

El argumento es el peor problema de esta película ya que carece de espontaneidad, de "chispa", de novedad. Además, tal parece -por lo que se lee en los créditos finales- que fue realizado hasta por seis personas, incluyendo a los Hermanos Farrelly. Esto supone una serie de "parches" que afectan la fluidez de la historia que le queda mucho a deber a la inversión económica y al tiempo del espectador.

En lugar de refrescar la historia con situaciones diferentes e hilarantes, se opta por querer imitar varios de los chistes de la primera cinta, lo que resulta cansino y aburrido. Otra vez existe la búsqueda de una chica, de la que nuevamente Lloyd se enamora platónicamente; se repiten o se hacen guiños a varias escenas de la original, sólo que en esta ocasión no conectan con la audiencia y; lo peor de todo, es que se obtiene un final sumamente desangelado.

Mientras que en la primera parte el desenlace es congruente y legendario, de acuerdo al contexto de la historia, el final de esta nueva cinta es tan simple como el reencuentro de esta pareja de tontos. Fanáticos nostálgicos de la saga también pueden salir decepcionados. Es mejor ver en la televisión un capítulo repetido de "Friends" que esto; al menos te ríes más.



Por otro lado, la cartelera nacional presenta "Big Hero 6" o "Grandes héroes", por su título en español, cuyo argumento se centra en la historia de un genio de la robótica y amante de las peleas callejeras de robots, Hiro Hamada, que vive en la ficticia ciudad de San Fransokyo junto con su hermano Tadashi y su tía. Hiro termina por envolverse en un acontecimiento inmerso de traiciones y complots que lo hacen conocer a un equipo de incipientes héroes con los que debe unir fuerzas para evitar la destrucción del lugar donde habitan.

"Grandes héroes" hace honor a una palabra que conforma su título, porque cuenta con una GRAN premisa ejecutada de manera más que sorprendente, sobre todo viniendo de un estudio como Disney que, aunque nos diga lo contrario, generalmente termina por mostrar varios estereotipos y narrar las historias de siempre. "Big Hero 6" es una de sus honrosas excepciones.

La película es amena, dinámica, novedosa, quizá porque su argumento está inspirado en un comic de superhéroes de Marvel con marcadas referencias a valores de la cultura japonesa. De hecho, por lo que pude investigar, "Grandes héroes" es la primera colaboración animada entre Marvel y Disney; el resultado de esta mancuerna es más que efectivo.

El diseño de arte de la ciudad de San Fransokyo; de los ambientes de cada personaje; de las escenas de acción (como en las que se muestran los Microbots) o; de una escena clave de la película -que se relaciona con una tele transportación- son de primer nivel. La gama de colores es hermosa y acogedora. La animación es epidérmica y sobresale mucho más gracias al extraordinario montaje que posee el citado largometraje.


Aunque existen ciertos arquetipos (más no estereotipos), el guión se percibe fresco, alentador, sólido. No desperdicia a ningún personaje secundario y encumbra al robot “Baymax” que, sin temor a equivocarme, será uno de los personajes más queridos por los niños y las niñas en la historia del cine moderno de animación. Imperdible cinta.

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