Resulta indudable admitir que Steven Spielberg es uno de los cineastas más influyentes de la historia del cine. Sus historias han sido entrañables y han cambiado la vida de muchos cinéfilos. Sus icónicas películas han marcado la infancia de varios y con el paso del tiempo han influenciado a otros cineastas. Junto con otros autores como George Lucas inició su carrera al recibir la oportunidad de varios productores que necesitaban sangre nueva para traer filmes con propuestas diferentes creando así lo que hoy conocemos como blockbusters, filmes comerciales cuyo impacto mediático y éxito se mide durante la recaudación del primer fin de semana en taquilla.
Dentro de su obra existen títulos inolvidables. Algunas de las joyas del séptimo arte que nos ha entregado son Tiburón, Encuentros Cercanos del Tercer Tipo, E. T. El Extraterrestre, El Color Púrpura, cuatro entregas de Indiana Jones, Hook: El Regreso del Capitán Garfio, Jurassic Park, La Lista de Schindler, El Mundo Perdido, Inteligencia Artificial, La Terminal, Caballo de Guerra, Puente de Espías y más recientemente The Post: Los Oscuros Secretos del Pentágono. Es el Rey Midas de la taquilla, prácticamente uno de los principales dueños del imperio hollywoodense y por todas estas razones resulta inconcebible perderse su nuevo largometraje Ready Player One, que además se basa en aquella novela de culto que hace todo un homenaje a la cultura popular ochentera y que fue escrita por Ernest Cline.
En Ready Player One se nos plantea una historia ubicada en un futuro cercano donde la realidad es terrible y todos se esconden en Oasis, una realidad virtual en donde juegas a ser quien tú quieras y puedes estar en cualquier parte. La interacción se efectúa entre avatares y la mayoría de la población vive pegada a esa plataforma. El creador de Oasis es James Halliday y antes de morir le informa a los usuarios que ha escondido un huevo de Pascua en ese universo virtual. Aquel que lo encuentre heredará su inmensa fortuna. Es entonces cuando se desata una competencia que involucra al mundo entero. Wade Watts, un joven usuario de Oasis, se une a la búsqueda adentrándose en un juego que tiene consecuencias que van más allá de la realidad virtual, involucrándose con empresas que querrán ganar ese huevo de Pascua de una forma u otra ya que el ganador no sólo está jugando por la herencia sino también por el futuro de todo el mundo.
La película que Spielberg nos presenta es un relato de ciencia ficción cuya estructura es aquella que todo mundo conoce y que hemos visto en una gran variedad de filmes: un joven huérfano que le es indiferente a todos intentará convertirse en héroe para salvar al mundo con ayuda de otros jóvenes marginados. Sin embargo, la historia funciona por los elementos que la conforman y por un elenco que está integrado por actores interesantes jóvenes y veteranos como Tye Sheridan, Olivia Cooke, Ben Mendelsohn, Simon Pegg y Mark Rylance.
El largometraje es una extraordinaria aventura visualmente hipnótica apoyada por efectos especiales de primer nivel que incluye una cantidad masiva de referencias de la cultura pop que todos los nostálgicos amarán. Música, películas y videojuegos forman parte de la historia. Personajes como El Gigante de Hierro, el DeLorean de Volver al Futuro, King Kong, Chucky o el Tiranosaurio Rex de Jurassic Park son sólo algunos de los que aparecen dentro del filme. Los diálogos hacen referencia a muchos otros trabajos cinematográficos y existen escenas con deliciosos homenajes a otros largometrajes, como aquella secuencia en la que Spielberg recrea ciertas momentos de una de las películas más representativas de la década de los ochentas.
Steven Spielberg crea una película en la que también reflexiona sobre la realidad que se ve venir. Una en donde la interacción personal es nula, la vida cotidiana resulta aburrida y el único escape es la tecnología que nos permite vivir conectados a mundos utópicos que representan algo mejor pero que al mismo tiempo nos desconectan de toda relación con la vida misma.
También es un homenaje a todo aquello que lo inspiró y que ha inspirado a muchos otros a través del cine, los videojuegos, libros, historietas, música. Spielberg termina haciendo un autohomenaje a lo que su cine y su legado han significado dentro del medio. Hace un homenaje a la nostalgia de una forma estupenda y vuelve a poner su nombre en alto dejando claro que es un cineasta versatil y bastante admirable.
Ready Player One es un trabajo de calidad que amarán todos los nostálgicos. Un homenaje a la cultura pop que ha inspirado a muchos. Una aventura virtual con una infinidad de referencias que la hacen bastante deliciosa. Una oda geek que también nos pone a pensar sobre la influencia de la tecnologia en nuestra vida diaria. Ready Player One es otro filme de Steven Spielberg que seguro se sumará a sus proyectos más representativos y que podrán disfrutar chicos y grandes por igual.
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